41. No serás un extraño de Morton Thompson.
Mi madre me compró esta novela,
contenida en dos tomos. Lo curioso es que el tomo uno tiene un error de
imprenta en la contra portada. La sinopsis no la que le corresponde, y se
confunde con otro libro de la misma colección.
Sinopsis
original:
La vida de un joven, fascinado desde
niño por la Medicina, que debe superar numerosas trabas para ver logrado su
sueño médico, desde la incomprensión familiar, la dificultad de los estudios,
los problemas económicos… (Fuente: Que Libro Leo).
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Sinopsis
del libro que me compraron:
Aparece el cuerpo de un hombre
asesinado en extrañas circunstancias; una pareja de adolescentes rapta a un
niño y los tres desaparecen mar adentro a bordo de un balandro; y, por si
fuera poco, un incendio forestal de dimensiones gigantescas amenaza a toda
una ciudad y corta las vías de comunicación.
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Continué leyendo con ansia y esperanzado
en que en cualquier momento, ese niño al que le empieza a gustar la medicina
fuese secuestrado, o que apareciera muerto, o que se convirtiera en el
detective del caso, lo que sea. La única muerte hasta dónde llegué es la de un
pollito que es aplastado por una puerta. Muy trágico todo. Entré buscando una
novela negra y encontré una novela dramática y de corte realista. Seguí leyendo
porque, pese a que no era lo que yo esperaba, es una historia interesante.
¿Por
qué lo abandoné? Como dije, son dos tomos, al mudarme a
México me llevé el libro equivocado.
42. Por el camino de Swan de Marcel Proust.
Otras de esas novelas que yo juraría
haber terminado. Durante un tiempo, me gustaba Proust, ese estilo reflexivo (y
redundante) con el que describe, una especie de narración circular. Estaba
ansioso de leer En busca del tiempo
perdido de cabo a rabo… y luego adquirí aversión a las sagas. A estas
alturas de la vida, dudo retomarla, pero conservo el libro como un bonito
recuerdo, la de mi etapa de lector romántico.
43. Oldboy de
Garon Tsuchiya.
Soy pobre y leer no siempre es barato.
Estoy seguro que muchos lectores nos encontramos en esa condición y terminamos
leyendo por medios alternativos, descargando libros en formato .pdf o .epub. También me gusta leer comics y novelas gráficas, pero
insisto. Soy pobre, y éstas últimas son incluso más caras que los libros y el
tiempo que tardas en leerlas es menor. Así que también terminas recurriendo a
alternativas para poder leer todo lo que quieres.
Hablando de Oldboy. Conocí primero la película de Chan Wook Park (el segundo
hombre al que me gustaría ver cada mañana junto a mí, amordazado). Sobre decir
que es mí película favorita, y que
su trilogía de la venganza es
hermosa (algún día me daré tiempo para hacer el video-análisis-reseña que llevo
pensando desde que la terminé). Y como muchos lectores, cuando descubro que una
película o serie que disfruté está basada en una novela, trató de conseguirla.
En este caso, hablamos de un manga contenido en cinco tomos. Me quedé en el
tercero. ¿Por qué? Pues, el archivo
.rar que contenía las imágenes, al convertirlo a .cbr, no me percaté de que la
numeración de páginas estaba mal (llegando al página 010, le seguía la 110 y
así sucesivamente). Entonces tenía que darme a la tarea de corregir eso… y me
dio flojera.
44. Y amanece la muerte de Jim Crace.
Otros de esos libros que empiezas a leer
esperando otra cosa. No sé a la fecha como tomarla, es una novela muy corta
pero de un género al que no estoy muy acostumbrado (¿realista?). El punto de
partida es el asesinato de una pareja de ancianos, pero a partir de ahí la
novela nos cuenta la historia de dicha pareja, intercalada con descripciones
sobre el proceso de descomposición de ambos cuerpos. Me gustan las
descripciones pero el resto de la historia, bueno, no me gustó.
Y eso es todo, amigos.
¿Cuántos libros ha dejado incompletos?
¿Se arrepienten?
¿Les gustaría volver en el tiempo y
asesinar a Hitler?
Dejad vuestros comentarios, y felices
fiestas.
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